viernes, 14 de junio de 2013








EL HOMBRE COMO PROBLEMA ANTROPOLÓGICO



LA ANTROPOLOGÍA GRIEGA

EL HOMBRE COMO PARTE DE LA NATURALEZA
La búsqueda continua del cosmos, por parte de los pensadores griegos, los condujo a descubrirse como parte importante de ese cosmos, y en consecuencia, a preguntarse por sí mismos. Esta pregunta por el hombre nos ha permitido, desde aquellos tiempos hasta hoy, comprender el mundo y darle sentido.
Como indicadores de este discurso de la filosofía, que recibe el nombre de antropología, encontramos a tres figuras fundamentales: Sócrates, Platón y Aristóteles.

EL ORIGEN DE LA PREGUNTA PARA EL HOMBRE
Sócrates es considerado para muchas personas como uno de los personajes más influyentes en la historia de la filosofía, no solo por haber hecho de su vida un modelo de conducta –Que determinó poderosamente la filosofía de sus seguidores Platón y Aristóteles- sino por el giro radical que le dio al pensamiento griego.
Fue precisamente Sócrates, quien indujo el tema del hombre en el ámbito de la filosofía. Al decir de un filosofo del a antigüedad, Sócrates bajo la filosofía del cielo a la tierra.

SOCRATES Y LA VERDAD DEL HOMBRE

¿QUE ES EL HOMBRE?...

La descripción de las propiedades y cualidades de la naturaleza no dicen nada acerca de lo humano, y considera que precisamente esta investigación es mucho más importante y urgente que la investigación física.
Sócrates  opina que antes de conocer el arjé, el hombre debe ser educado en el conocimiento de su verdadera naturaleza. Su filosofía constituye así, un análisis detallado de las diversas cualidades y virtudes humanas, desde donde busca revelar la verdad ultima del hombre. Sócrates nunca se atrevió a dar un significado de hombre, de hecho nunca espero encontrarla. Su filosofar debe entenderse como una actitud de exhortación y educación que ocurre en el dialogo mismo, es a través de este dialogo que le hombre se manifiesta. Para Sócrates la verdad del hombre es una pregunta abierta.

EL HOMBRE PARA PLATÓN


Para Platón existen dos mundos, el mundo de las ideas, donde toso es eterno y perfecto; y el mundo físico, imperfecto, temporal, aquel donde vivimos, que es simplemente un reflejo del otro mundo.
La verdad entonces es solo posible en ese mundo de las ideas, porque esta solo puede provenir de lo universal y necesario para Platón, el alma humana, que ha existido siempre en el mundo de las ideas, al encontrarse en un  cuerpo dentro del mundo sensible olvida por completo sus conocimientos y requiere del contacto con los objetos del mundo, que son copias o imagen de las ideas, para poder recordar la verdad del mundo suprasensible.
Con esto se concluye que lo que platón piensa es que el hombre es un alma eterna e inmortal encarcelada en un cuerpo, cuyo fin es el descubrimiento de la verdad en el mundo de las ideas, el cual debe regresar.


LA ANTROPOLOGÍA MEDIEVAL
La filosofía de la edad media es presentada generalmente como oscura y sin trascendencia, pero de sus autores y doctrinas se encuentra impregnada nuestra cultura, especialmente en lo que se refiere a la antropología.
El problema principal de la filosofía medieval europea es la relación del mundo y del hombre con Dios, fundamentalmente con la visión cristiana de Dios.
Durante largos siglos los filósofos cristianos se dedicaron a desentrañar este problema, estando siempre atentos a no contrariar con sus tesis las doctrinas de la fe cristiana. En este largo proceso debemos destacar a dos autores muy importantes, quienes se carácter izaron por realizar grandes obras, en donde se sintetizan los principales momentos del pensamiento: San Agustín de Hipona  y Santo Tomás de Aquino.

EL HOMBRE COMO ALMA PARA SAN AGUSTÍN

                                                      
Su pensamiento proviene de una experiencia intensa en la búsqueda de la verdad que, después de varias etapas lo condujo a la conversión del cristianismo. Su pensamiento tiene  una clara influencia platónica que algunos no dudan en llamar neoplatonismo.
El hombre para San Agustín es un  alma racional que tiene un cuerpo mortal y terreno para su uso. El alma entonces es definida como cierta sustancia dotada de razón que domina y rige el cuerpo. El hombre por lo tanto es el alma y su cuerpo no es un elemento constitutivo esencial.

EL HOMBRE COMO SUSTANCIA PARA SANTO TOMÁS 

                                                     
Para Santo Tomás la razón y la fe, son dos campos diversos que necesitan ser equilibrados y complementados, por ello concibe al hombre como un ser ubicado en el mundo, del cual forma parte y en el cual ocupa un  lugar determinado.
El hombre está situado en el culmen de lo material y espiritual, por lo cual le da un sentido a todos los demás seres de la naturaleza. Para Santo Tomás el hombre es un todo constituido por la unión inseparable del cuerpo y el alma. El alma es individual e inmortal y creada por Dios, está en todo el cuerpo y requiere de este para manifestarse.


EL RENACIMIENTO

UN PERIODO DE TRANSICIÓN
Durante este periodo hay que destacar la implantación del método científico (determina aspectos de la vida cotidiana marcada por la tecnología) y el desarrollo del arte (Creó la perspectiva, una forma de ver el mundo que aun hoy consideramos la más adecuada).
Algo que caracteriza a los renacentistas es la actitud crítica frente a la herencia y las tradiciones que recibieron del Medioevo. Sin embargo, filósofos y artistas generaron respuestas distintas que descansaban sobre puntos de vistas particulares. Es por esta razón que los filósofos no pudieron agruparse en una misma escuela, que los artistas respondían a búsquedas específicas y que las sociedades o naciones no puedan definirse con un modelo social que los agrupe.

LA REVOLUCIÓN CULTURAL
Con el renacimiento se da la revisión de dos asuntos fundamentales: el análisis del lenguaje y el análisis de la historia, la finalidad de esto fue la reforma de la teología y la religión cristiana. A partir de esto se instauró y fortaleció el pensamiento del método científico y de la filosofía moderna. Pero sin duda, el impacto principal del renacimiento fue el producido a los niveles político y  social.
Las fuerzas económicas emergentes encontraron, en la crítica a la religión, la ocasión perfecta para acabar con la injerencia de la iglesia en los asuntos de los estados. De este modo lograron también desacreditar a la nobleza e ilegitimar su acaparamiento del poder. En este contexto florecieron las artes, el comercio y los asuntos políticos y culturales, adquirieron un matiz definitivamente laico.

LA ANTROPOLOGÍA MODERNA

EL RACIONALISMO
                                             
Este concepto nace dentro de la filosofía moderna, gracias al pensamiento renacentista. Algunos de los elementos que llevaron al racionalismo en la filosofía moderna fueron la liberación progresiva de los sistemas medievales, que nos permitían la experimentación; la nueva afición por las ciencias de la naturaleza y la experimentación; las nuevas teorías sobre la astronomía y la física planteada por Nicolás Copérnico y Johannes kepler, y la creación y la implantación del método experimental en el estudio de los fenómenos naturales.
Para el racionalismo moderno, el hombre y su racionalidad son la fuente y la base de todo conocimiento, es en esta época cuando se desarrollaron las primeras investigaciones sociales, al interior de los movimientos como la Ilustración del siglo XVII y la Enciclopedia.

EL HOMBRE NATURAL DE ROUSSEAU

                                                      
Jean Jaques Rousseau fue probablemente el más profundo y original de los hombres del siglo XVII y el que más influyó en el mundo contemporáneo. Para Rousseau el hombre se encuentra en la paradoja del ser natural y libre que es el estado en el cual nace, y el ser artificial o social que es la estructura que se lo impide. El hombre en su estado natural primitivo, es eternamente libre, luego la desigualdad aparece con la sociedad: “El hombre es bueno y la sociedad lo corrompe” El ideal natural de la humanidad será entonces, retornar al estado primitivo, semejante al que los pobladores Europeos vieron en los pueblos primitivos de América y Oceanía.

EL HOMBRE COMO SER AUTÓCTONO PARA KANT
                                                    
Para este filosofo alemán la pregunta fundamental del hombre es su deber ser, es decir, que debe hacer el hombre y que le cabe esperar al hombre dentro de la existencia.
Para Kant, existe en todos los hombres una ley moral universal, a la cual deben  acomodarse sus conductas. Esta ley es común a todos los hombres por ser expresión a su naturaleza racional y exige la autonomía del hombre, ya que el obrar moralmente consiste en cumplir la ley por respeto a la ley misma. La antropología kantiana percibe al hombre libre  autónomo, bajo la tutela de un ser supremo, que garantiza el cumplimiento del deber ser, recompensado con la felicidad eterna.

EL HOMBRE COMO SER SOCIAL Y ECONÓMICO
De las posturas que salieron del idealismo hegeliano, cabe destacar la obra de Karl Marx, quien en su intento por hacer una lectura total de la naturaleza humana, destaca ante todo el carácter social del hombre y el valor de trabajo como medio de realización.
Para Marx, el hombre hace su historia y logra desarrollarse plenamente solo en la sociedad, a través de las relaciones con los demás. Su trabajo le permitirá adquirir los medios materiales que le garantícenla satisfacción total de sus necesidades y también les den  posibilidad de ayudar a la comunidad. Para Marx comprender al hombre, implica comprender su organización social.

NIETZSCHE Y LA AFIRMACIÓN DEL INDIVIDUO
                                         

LO DIONISIACO Y LO APOLINEO
Para Nietzsche la naturaleza humana estaba constituida por un elemento racional y un elemento desconocido, que podríamos denominar instinto.
Nietzsche representa estos dos principios básicos en dos figuras tomadas de la mitología griega: El dios Apolo, símbolo de la serenidad, del equilibrio y la medida; y el dios Dionisio símbolo de lo instintivo, impulsivo y excesivo.
Nietzsche destaca siempre la importancia de la vida, la ve como el despliegue de todas las capacidades humanas en busca de potenciar todas las habilidades del hombre.

LA VOLUNTAD DE PODER
El verdadero hombre dice Nietzsche es aquel que ha desarrollado una voluntad de poder, de crear, de actuar, aquel que librándose de los valores tradicionales, pone en marcha su verdadera existencia. El hombre debe superarse, terminar en algo que esté por encima de él, como el hombre está por encima del mono, esto es el superhombre, aquel que vive plenamente en el mundo de los sentidos, mirando a la vida a través de sus instintos, sin temor de enfrentarse continuamente a la muerte.

EL HOMBRE: PRIMERO LA EXISTENCIA

EL HOMBRE ES SU LIBERTAD: SARTE
                                                   
Jean Paul Sarte, intentó elaborar la filosofía a partir de la conciencia del hombre, le descubre su existencia y con ello la angustia de la libertad, al enfrentarse a la búsqueda del sentido  de su que hacer en el mundo.
Para Sarte la existencia del hombre en su misma existencia, es decir, lo que hace y siente el hombre; por ello el hombre no solo es libre, sino que está condenado a la libertad, una libertad absurda que le ha sido impuesta sin su consentimiento y que además no conduce a ningún sitio.
Sarte considera al hombre como una pasión inútil, por lo cual lo identifica con la nada, que es lo que determina el sentido de la existencia humana.

EL HOMBRE VISTO DESDE EL PERSONALISMO DE MOUNIER

                                               
La persona constituyó el centro de su reflexión. Mounier no fue un amigo de las definiciones, de ahí que no se preocupo por definirla. Unifica toda su actividad en la libertad.
Mounier ve en la persona distintos aspectos que la complementan, la enriquecen en su ser y la proyectan a la realidad:
·         La libertad: consiste en el desarrollo de las capacidades del hombre para el servicio de los demás.
·         El compromiso: con este en acción, la persona se hace libre, sirviendo a los demás.
·         Para Mounier el individuo es el ser humano para el que las demás personas no existen, al contrario de la persona que es el ser humano proyectado hacia los demás.


ELEMENTOS EN COMÚN: SÓCRATES, PLATÓN Y ARISTÓTELES
Entre las similitudes que tienen Sócrates, Platón y Aristóteles, podemos encontrar que tiene como eje el estudio del hombre.
También encontramos que le hombre no es un ser dividido, una dualidad irreconciliable, debe ser un todo. Una unión entre cuerpo y alma, entre una forma o sustancia y la materia.
En síntesis, el hombre es un ser pluridimensional. Que forma una unidad, una totalidad inseparable. Son aquellos elementos que lo constituyen (al hombre) y lo definen como tal, independientemente de sus características individuales.